El valor de las importaciones de ropa, accesorios y otros artículos de piel en la Unión Europea ha descendido más de un 60% en la última década, según afirmó el viernes la organización de defensa de los animales Four Paws, que pidió la prohibición de las granjas peleteras.

"La industria de la piel está en caída libre, por lo que la cuestión de la relevancia de una industria basada en la crueldad animal se plantea hoy de forma aún más aguda", dijo Thomas Pietsch, responsable de Animales Salvajes en el Entretenimiento y Textiles de Four Paws.

Entre 2011 y 2021, el valor de las importaciones en la UE se redujo a 138,3 millones de dólares desde unos 363,6 millones, según la base de datos Comtrade de las Naciones Unidas.

En un esfuerzo por atraer a los compradores más jóvenes, cada vez más sensibles a las cuestiones éticas y medioambientales, las marcas de moda se han comprometido a prohibir las pieles de animales, como Prada, Kering, Moncler, Valentino y Versace.

Four Paws informó de que la producción de pieles disminuyó considerablemente, hasta 11 millones de pieles de animales en 2021, frente a 38 millones en 2018.

Pero si los abrigos confeccionados íntegramente con pieles han pasado de moda en los últimos años, se ha seguido utilizando como adorno o en bolsos de alta gama.

El gigante francés del lujo LVMH , que sigue vendiendo pieles, anunció en abril su asociación con el Imperial College de Londres y el Central Saint Martins para desarrollar fibras de piel cultivadas en laboratorio.

Según Four Paws, las pieles también suponen un riesgo para la salud, como demuestran los brotes de coronavirus en las granjas de visones, que llevaron al sacrificio masivo de animales infectados en 2020 en Dinamarca y Países Bajos, desatando protestas públicas y la exigencia de prohibir el uso de artículos de origen animal en la industria de la moda.

"El fin de las granjas peleteras está cerca", dijo Pietsch. "Este comercio bárbaro y anticuado no tiene cabida en nuestra sociedad ni en la economía moderna. Ya no hay argumentos para ello, la Comisión Europea debe actuar de una vez".