Santiago. La Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), la Central Unitaria de Trabajadores de Chile (CUT) y las organizaciones que integran la Mesa Unidad Social, volvieron a las calles de Santiago de Chile para protestar contra el Gobierno del presidente, Sebastián Piñera, en un 'Súper Lunes' de marchas que finalizó con disturbios e incidentes violentos en algunas zonas.

"Hoy el Gobierno le pone el acelerador a una batería de proyectos, todos contrarios a derechos y profundizando las políticas neoliberales. Por eso decimos con mucha fuerza y claridad que en nuestras reivindicaciones como pueblo hoy día, no hemos ganado nada. Por eso, es fundamental que sigamos en la lucha, que sigamos movilizados", manifestó la directiva de la CUT.

Santiago de Chile se convirtió de nuevo en el epicentro de una concentración, especialmente en las inmediaciones de la Plaza Italia, donde a partir de las 17.00 (hora local) comenzaron a marchar los manifestantes con destino a la Plaza los Héroes.

Varios testigos afirmaron que el número de personas concentradas en la zona podrían superar el registrado el viernes pasado en el mismo sitio. La Intendencia Metropolitana estima que la asistencia es de unas 20.000 personas.

Las partes involucradas en la manifestación han instado a ir a la huelga en todo el país par expresar su descontento con los diputados del país latinoamericano, que se encuentra sumido en una grave crisis política desde que las autoridades anunciaron un aumento del precio del billete de metro el pasado mes de octubre.

El ministro del Interior, Gonzalo Blumel, calificó el hecho de "cobarde" y llamó a los distintos sectores a condenar los actos de violencia. En este sentido, advirtió de que los hechos "no tienen nada que ver con las legítimas demandas de los ciudadanos".

Según la emisora local 'Radio Cooperativa', durante la jornada varios manifestantes resultaron heridos -entre ellos uno que ha sido atropellado por un vehículo de las fuerzas de seguridad y varios funcionarios-, se produjeron incendios, saqueos y barricadas.

Además, los manifestantes sacaron el mobiliario del interior de la Casa Central de la Pontificia Universidad Católica de Chile y bloquearon el tráfico en varios puntos de la localidad.

Al menos dos carabineras de las Fuerzas Especiales fueron alcanzadas por cócteles molotov, por lo que han sido trasladadas a un hospital de la zona con quemaduras.

Ambas carabineras, cuya identidad es anónima, se encuentran fuera de peligro, según el diario local 'La Tercera'. El ministro del Interior, Gonzalo Blumel, calificó el hecho de "cobarde" y llamó a los distintos sectores a condenar los actos de violencia.

En este sentido, advirtió de que los hechos "no tienen nada que ver con las legítimas demandas de los ciudadanos". "Es violencia pura, por lo que aplicaremos todos los recursos que nos permite la ley para sancionar a los culpables de estos actos tan cobardes", aseveró.

"Fue una agresión violenta, cobarde contra dos mujeres carabineras que estaban trabajando para resguardar la seguridad de nuestros compatriotas", sostuvo la ministra del Interior, Karla Rubilar.

Por otra parte, se ha producido un nuevo episodio de saqueo en el Hotel Principado de Asturias, que ya había sido objetivo de una acción similar el 23 de octubre.