Nueva York. La multinacional anglo-holandesa Unilever ha vendido el fabricante de mantequilla de cacahuete Skippy a la empresa estadounidense Hormel Foods por cerca de US$700M, según anunciaron este jueves las compañías en sendos comunicados.

Hormel Foods, un fabricante de alimentos y productos cárnicos con sede en Austin (Minesota), adquirió la marca con una previsión de facturación anual de aproximadamente US$370 millones.

La transacción incluye las instalaciones de las plantas estadounidenses de Unilever Skippy en Little Rock (EE.UU.) y Weifang (China), donde la marca es líder de ventas.

Según destacó el presidente de Hormel Foods, Jeffrey Ettinger, la adquisición de la Skippy es una oportunidad "significativa" para su empresa, que podrá aumentar su presencia de marca con un producto proteínico no cárnico.

"El rápido crecimiento internacional de la línea también fortalecerá nuestra presencia global y debe ser un complemento útil a nuestra estrategia de ventas en China", añadió Ettinger.

La presencia internacional de la marca Skippy, con once variedades diferentes de mantequilla de cacahuete, se refleja en los US$100 millones que ingresa en ventas fuera de EE.UU. gracias a su presencia en más de 30 países.

Por su parte el presidente de la división de Unilever en América del Norte, Kees Kruythoff, remarcó que Skippy es una marca "icónica" con presencia internacional aunque señaló que "el potencial de la marca puede ser más plena con Hormel Foods".

Después de conocerse la transacción, las acciones de la compañía Hormel Foods subían hoy en la bolsa de Nueva York 4,19% hasta situarse en los 33,35 dólares, mientras que las acciones de Unilever, que cotizan en la bolsa de Londres, subieron ligeramente 0,29%.