Bruselas. La cervecería holandesa Heineken NV dio un paso enorme este miércoles hacia la toma del control de la marca Tiger y de una red asiática de firmas de cerveza luego de que un rival tailandés aceptara el acuerdo.

La empresa Thai Beverage PCL, del magnate Charoen Sirivadhanabhakdi, y TCC Assets Ltd dijeron que votarían a favor de la venta de la participación del conglomerado singapurense Fraser and Neave en Asia Pacific Breweries Ltd a Heineken.

A cambio, Heineken, la tercera cervecería más grande del mundo, no hará ofertas por acciones en F&N.

El acuerdo entre los tailandeses -principales accionistas de F&N con cerca del 31% del paquete- y la cervecería holandesa puso fin a un estancamiento de dos meses de competencia por el control de APB.

Después del acuerdo, Heineken dijo que tambiém compraría un 8,6% de participación directa en APB que es propiedad del yerno de Sirivadhanabhakdi, a través de su firma Kindest Place Group.

Heineken, que ya tenía peso accionario en APB a través de su longeva sociedad de 81 años con F&N, ahora tomará el control total de la cervecería y protegerá su terreno en el creciente mercado cervecero de Asia.

Una vez que Sirivadhanabhakdi dio su aval para apoyar a Heineken, era lógico que Kindest Place también quisiera vender su parte, indicó Wim Hoste, analista en KBC Securities.

Las acciones de Heineken subían un 6,3% a 45,54 euros a las 1420 GMT.

Los analistas dijeron que Heineken está pagando un precio excesivo por un acuerdo que ofrece limitadas sinergias y un acotado incremento de las ventas, dado que ya opera el negocio de APB.

Sin embargo, los bajos costos de financiación para Heineken y el gran potencial de crecimiento hacen que el acuerdo pueda incrementar las ganancias de manera inmediata. Los ingresos de APB aumentaron un 49% en los últimos dos años.