Nueva York. Petrobras tiene como objetivo elevar la producción de crudo de 8% a 10%, a unos 2,3 millones de barriles por día (bpd), en 2019 y reducir la deuda en otros US$10.000 millones el próximo año, dijo el director ejecutivo financiero y de relación con inversores de la estatal, Rafael Grisolia, a Reuters.
La petrolera más endeudada del mundo está en camino de reducir la deuda a US$69.000 millones hasta finales de este año, a pesar de estar por debajo de la meta de US$21.000 millones de desinversiones (bienio 2017-2018), afirmó el ejecutivo en una entrevista Nueva York.
La empresa redujo significativamente su deuda neta con respecto a los US$106.000 millones de 2014, cuando destinó importes elevados para financiar el desarrollo de enormes campos de petróleo en el pre-sal.
Posteriormente, Petrobras perdió la confianza del inversor a medida que los precios del petróleo cayeron, un escándalo de corrupción alcanzó la empresa y las pérdidas en el área de abastecimiento aumentaron.
Petrobras pretende reducir la deuda neta en otros US$10.000 millones en 2019 para llegar a una razón de 2 veces la deuda neta por el Ebitda, dijo.
En los próximos cinco a seis años, una vez que la empresa haya alcanzado las metas de reestructuración de deuda, Petrobras puede considerar inversiones extranjeras para facilitar las exportaciones resultantes del aumento de la producción de los campos del pre-sal, dijo.
La empresa continuará cortando su deuda hasta que la proporción deuda neta / Ebitda alcance de 1 a 1,5 veces, destacó el ejecutivo, lo que colocaría a la compañía en línea con sus pares del sector petrolero en el mundo.
"Si usted mira a nuestros competidores directos y pares como Chevron, Exxon y BP, necesitamos buscar una estructura de capital más ligera", dijo Grisolia.
La empresa debe alcanzar una proporción de 1,5 veces en 2020 como parte del próximo plan de negocios de cinco años de Petrobras, dijo, aunque eso dependerá de los precios internacionales del petróleo y de otras variables, como el tipo de cambio.
En los próximos cinco a seis años, una vez que la empresa haya alcanzado las metas de reestructuración de deuda, Petrobras puede considerar inversiones extranjeras para facilitar las exportaciones resultantes del aumento de la producción de los campos del pre-sal, dijo.
La empresa puede invertir en terminales en el exterior para recibir gas natural licuado (GNL), dijo Grisolia. Esto ayudaría a Brasil a exportar más gas, agregó.
Exxon Mobil, BP y Shell están entre las empresas que planean invertir miles de millones de dólares en el desarrollo de reservas en aguas profundas en Brasil.
Se estima que Brasil debe responder por una gran parte del aumento en la producción global de petróleo y gas de países no miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Precios del petróleo ayuda. La compañía espera que su producción de petróleo aumente en un 8% a 10% el próximo año, de unos 2,1 millones de barriles por día (bpd) en 2018, afirmó Grisolia. Esto debe contribuir al aumento de los ingresos, destacó el CFO.
Los precios del petróleo subieron a un promedio de tres años y medio recientemente, a medida que las ofertas globales se volvía más estrechas.
Los precios más altos del petróleo que los estimados por la empresa en 2018 aumentaron los ingresos y permitieron que Petrobras alcanzara su meta de reducción de deuda, dijo. Esto compensó US$7.000 millones en ventas de activos que Petrobras esperaba recibir este año, agregó el ejecutivo.
La empresa ya ha recibido US$5.000 millones en ventas y recibirá otros US$2.000 millones antes de fin de año, dijo.
"Toda la desinversión y el dinero de la desinversión ayudará, pero no necesitamos necesariamente para alcanzar la meta de US$69.000 millones hasta el final del año", destacó.
Subsidios al diesel. En mayo, una protesta de los camioneros en todo el país contra precios crecientes del diesel paralizó la mayor economía de América Latina y obligó al gobierno a bajar los precios del diesel a través de recortes de impuestos y subsidios.
Esto perjudicó el precio de las acciones de Petrobras, ya que los inversores se preocuparon de la posibilidad de que la empresa perdiera de nuevo dinero para subsidiar las ventas de combustible.
La empresa espera recibir de 2.000 millones a 2.500 millones de subsidios de la reguladora de petróleo del país, la ANP, dentro de dos semanas, para compensar el hecho de estar sosteniendo las cotizaciones en las refinerías, dijo Grisolia.
Las subvenciones han hecho menos rentable para el sector privado la importación de diesel, dijo, pero algunas compras externas del producto continúan, y no prevé ninguna escasez de combustible.