Ciudad de México. Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó que cuenta con 10.439 estaciones de servicio gasolinero bajo su franquicia, lo que implica una reducción anual de más de 11% o 1.271 establecimientos que cambiaron de marca entre septiembre del 2017 y el cierre del tercer trimestre de este año.

Sin embargo, la estatal suministra combustible todavía a 98% del total de las estaciones del país y un máximo de 230 establecimientos cuentan con abasto propio.

Según el último reporte trimestral de la empresa, hasta septiembre del año pasado había 12.007 estaciones de servicio en el país. En tanto, al cierre del tercer trimestre de este año, 359 estaciones operan bajo la figura de sublicencia de Pemex y reciben todavía su abasto de combustibles, mientras que 980 establecimientos tienen otras marcas y la proveeduría de la estatal. Así, un total de 11.778 estaciones reciben gasolinas de Pemex y sólo las restantes 230 de otros proveedores.

En comparación con el trimestre anterior, al cierre de junio —en el que Pemex reportó por primera vez la evolución de las estaciones de servicio bajo su modelo de negocio y suministro de forma separada—, los establecimientos de su franquicia cayeron 3,1%, que son 343 estaciones de servicio que cambiaron de marca en un trimestre.

Al 30 de junio, se reportaron 10.782 estaciones de servicio incorporadas a la franquicia Pemex, una disminución de 10,1% con respecto a las registradas en el mismo periodo del 2017. En adición a las primeras, reportó también que 1.321 estaciones recibían productos de Pemex.

Los importadores. Las marcas de terceros que han anunciado que reciben combustible de un proveedor distinto a Pemex son la estadounidense Profuels, que bajo la marca gasolinera Arco recibe gasolinas de Andeavor (antes Tesoro) especialmente fabricados para el mercado mexicano.

 

En su página comercial, la empresa asegura que cuenta con una flota de 90 unidades que distribuye combustibles vía terrestre y recientemente anunció la apertura de su establecimiento número 100.

Andeavor es la única empresa ganadora de las temporadas abiertas exitosas que ha realizado Pemex Logística para arrendar capacidad de almacenamiento y distribución, luego de que obtuvo el uso de tres terminales marítimas y de almacenamiento en los estados de Baja California Sur y Sinaloa, más dos poliductos y dos terminales de almacenamiento en Chihuahua; además de los poliductos Rosarito-Mexicali, Rosarito-Ensenada, Guaymas-Hermosillo y Guaymas-Ciudad Obregón, así como las terminales de almacenamiento de Rosarito, Mexicali y Ensenada en Baja California, y Guaymas, Ciudad Obregón, Hermosillo, Magdalena, Nogales y Navojoa en Sonora.

Por otra parte, en cinco meses de operaciones, la estadounidense ExxonMobil ha importado 900.000 barriles de combustible a México —equivalente a 2,1% de la importación mensual de Pemex— por tren a través de dos terminales, una en San Luis Potosí y otra en San José Iturbide, Guanajuato. En el primer semestre del año, superó los 90 establecimientos.

Al concluir el verano, sus planes incluían el transporte de productos por tren en dos nuevas terminales privadas: una en Tula, Hidalgo, para abastecer combustibles al estado de México y Puebla, y la otra en Salinas Victoria, Nuevo León para suministrar a dicho estado y también a Coahuila, además de Aguascalientes, Querétaro y Guanajuato, donde se estableció en el inicio.

Pemex inauguró el 1 de agosto la primera estación de servicio bajo la nueva imagen de la franquicia Pemex y en su reporte trimestral aseguró que en el transcurso del 2018 serán 45 estaciones de servicio que incorporarán la nueva imagen.