Ciudad de México. Petróleos Mexicanos (Pemex) alcanzó únicamente 58% de su meta de perforación de pozos para el 2019 al llegar a noviembre, ya que reporta 206 pozos perforados cuando en el Presupuesto de Egresos se comprometió a perforar 354 pozos a lo largo del año. Este cumplimiento de la meta está por debajo de 65% que alcanzó el año anterior.
En la Estrategia Programática del Presupuesto de Egresos de la Federación, la estatal comprometió la perforación de 62 pozos exploratorios y 292 pozos de desarrollo. Pero al llegar al penúltimo mes del año, ha logrado únicamente 20 pozos exploratorios, es decir, 32% de la meta, además de 186 pozos de desarrollo, que implica un avance de 64% de sus planes.
De acuerdo con los reportes de perforación de la empresa, de los 20 pozos exploratorios que ha ejecutado, 10 se localizaron en aguas someras del golfo de México, nueve en tierra, dentro de sus asignaciones, y únicamente uno en aguas profundas, en un área contractual que le fue adjudicada en las rondas petroleras de la pasada administración.
En términos de perforaciones para el desarrollo y posterior producción de hidrocarburos, se observa un mayor avance gracias a que cuenta con planes aprobados por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) para 20 nuevos campos. Así, presenta hasta noviembre la perforación de 186 pozos de desarrollo, de los cuales 145 se ubicaron en tierra y 41 en aguas someras mexicanas.
Sin embargo, las perforaciones y producción de estos campos se multiplicarán por lo menos por cinco el próximo año, ya que arrancará el desarrollo masivo de los nuevos campos de desarrollo.
Avance en campos prioritarios. Hasta noviembre, únicamente dos de los 20 campos que Pemex definió como prioritarios para este año arrancaron su producción. De acuerdo con la CNH, sólo los campos Chocol e Ixachi aportaron a la producción actual de la petrolera nacional.
En el penúltimo mes del año, el pozo Chocol sumó a la producción nacional 702 barriles diarios de crudo, mientras que Ixachi aportó 45 millones de pies cúbicos de gas.
Pero cabe recordar que en diciembre del 2018, Pemex anunció el plan nacional de hidrocarburos, que tiene como base el desarrollo de pozos en 20 campos de tierras someras, en los cuales la compañía basaba su pronóstico de lograr una producción de 1 millón 800,000 barriles al concluir el año.
Según el último cronograma presentado durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador por Octavio Romero Oropeza, director general de Pemex, cinco campos habrían iniciado ya operaciones antes de concluir el año: Xikin, Cibix, Valeriana, Quesqui y Chejekbal.
Pero además, la petrolera estatal se retrasó también con la presentación de planes de desarrollo de tres de los 20 campos prioritarios y hasta principios de noviembre había aprobado 17 de los 20 proyectos. Con el decimoséptimo plan aprobado para el campo Suuk en aguas someras, la estatal ha comprometido una inversión total de US$16.087 millones para las actividades de estas áreas en los próximos 20 años.
Los planes aprobados contemplan una inversión operacional e inversión estratégica o Capex de US$8.578 millones, además de un gasto de operación y otros egresos u Opex de US$7.510 millones, estableció la CNH. En tierra, se desarrollarán los campos Ixachi, Chocol y Cibix, mientras que en aguas someras los campos con planes de desarrollo aprobados son Xikin, Esah, Suuk, Koban, Mulach, Tlacame, Hok, Teekit, Manik, Uchbal, Octli, Tetl, Cahua y Cheek.
Con estos planes, Pemex ha comprometido la perforación de 119 pozos de producción, de los cuales 55 se ubicarán en tierra y 64 en aguas someras del golfo.
El pico de producción de crudo en estos campos ascenderá a 307.000 barriles diarios en el 2022, equivalente a 18% de la extracción nacional actual. Tan sólo este año, la extracción de estos campos añadirá 15.000 barriles por día, volumen que ascenderá a 184.000 barriles diarios el próximo año y a 301.000 barriles diarios en el 2020.
