Los ingresos consolidados de la multilatina de tecnologías de la información (TI), Sonda, cayeron un 5,9% durante 2020 llegando hasta los US$ 1.065 millones, casi $ 780.500 millones de pesos chilenos, el país de origen de compañía
El ajuste en los ingresos se debió principalmente por la disminución de actividad global, aunque “recuperando crecimiento en el cuarto trimestre”, aseguraron desde la empresa.
Por otro lado, el EBITDA, indicador de rentabilidad financiera que hace referencia a las ganancias de la compañía antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones, cerró en US$ 118,63 millones.
Ya durante el año pasado, el EBITDA había caído 4.4% respecto del 2019, no obstante el mayor dinamismo a partir de la segunda mitad del año, producto de ajustes operacionales que llevó a mejores resultados en Chile y México.
La Utilidad Neta del 2020 llegó a tan solo US$ 0,63 millones, impactada por una pérdida en el resultado no operacional debido a cargos extraordinarios registrados en el período, entre otros, gastos de reestructuración y deterioro de plusvalía, señalaron desde Sonda.
Al cierre de 2020, el margen EBITDA alcanzó un 11,1%, expandiéndose 10 puntos base en relación al año anterior. Ya para el cuarto trimestre, éste llegó a 12,7%, creciendo 120 puntos base respecto del mismo período de 2019.
La Utilidad Neta del 2020 llegó a tan solo US$ 0,63 millones, impactada por una pérdida en el resultado no operacional debido a cargos extraordinarios registrados en el período, entre otros, gastos de reestructuración y deterioro de plusvalía, señalaron desde Sonda
En términos comerciales, los cierres de negocios llegaron a US$ 1.025 millones. Destaca la tendencia registrada en el cuarto trimestre donde los cierres totalizaron US$ 342 millones, representando un aumento de 21,3% respecto de igual período de 2019.
Las oportunidades de nuevos negocios llegaron a US $5.080 millones, lo que supone un aumento de 35,9% respecto de las cifras reportadas al cierre de 2019.
El Gerente General de SONDA, José Orlandini, señaló que “los efectos de la pandemia y su impacto en la economía de la región hizo del 2020 un año muy desafiante".
“Aseguramos la continuidad operacional de los servicios en momentos en que la tecnología jugó un rol trascendental”, concluyó el ejecutivo.