Bogotá. Avianca Holdings anunció este lunes el nombramiento del holandés y experto de la industria aérea Anko van der Werff como nuevo presidente ejecutivo de la aerolínea insignia de Colombia, quien tendrá el reto de liderar el proceso de reestructuración y fortalecimiento financiero de la compañía.
Van der Werff se desempeñó hasta hace poco como vicepresidente ejecutivo comercial de Aeroméxico y antes trabajó en Qatar Airways y Air France-KLM, una de las primeras empresas de aviación comercial en el mundo.
"Su gran experiencia en aerolíneas de talla internacional no solo nos permitirá darle continuidad a nuestra transformación, también nos dará la oportunidad de fortalecer la lealtad de nuestros clientes, de avivar el compromiso de nuestros empleados y de robustecer la competitividad de nuestra compañía y su situación financiera", dijo Roberto Kriete, presidente de la Junta Directiva de Avianca Holdings.
Van der Werff, con 19 años de experiencia en la industria aérea, remplazará a Hernán Rincón, quien renunció a su cargo en abril después de tres años.
"Trabajaremos con agilidad para rentabilizar la operación, con paso firme para darle mayor confianza a los inversionistas y mejoraremos nuestra posición competitiva a través de un servicio confiable, amable y con la flota más joven de la región", dijo el entrante presidente ejecutivo de Avianca Holdings.
La llegada Van der Werff se produce más de tres semanas después de que Synergy Group Corp, del empresario Germán Efromovich, perdió el control de Avianca Holdings tras incumplir un acuerdo de cobertura por un préstamo a la estadounidense United Airlines, que entregó la administración de la aerolínea al socio minoritario Kingsland.
Avianca Holdings cerró en marzo un acuerdo con Airbus para aplazar la incorporación de 35 aviones A320neo y cancelar la compra de otras 17 aeronaves de un pedido inicial de 128, lo que le permitirá reducir compromisos financieros por 2.600 millones de dólares y mejorar su flujo de caja.
La aerolínea, que sirve en forma directa 76 destinos en 27 países de América y Europa con una flota de 175 aeronaves y 19.000 empleados, está inmersa en un plan de transformación que busca la optimización de recursos con iniciativas como la desinversión de activos no estratégicos y la simplificación de su flota para mejorar la rentabilidad.