Río de Janeiro. La aerolínea OceanAir que operaba bajo la marca Avianca Brasil y se encuentra en proceso de recuperación judicial, pidió a la Justicia brasileña que se decrete su bancarrota al no tener condiciones de cumplir los plazos de pago a los acreedores.

La información fue difundida este lunes al portal G1 por el bufete de abogados Alvarez & Marsal, que había sido designado como administrador judicial de la empresa.

La compañía pidió entrar en un proceso de recuperación judicial en diciembre de 2018, cuando se declaró sin condiciones de pagar las deudas que tenía, valoradas en unos 2.700 millones de reales (unos US$500 millones).

La recuperación judicial es una medida prevista en la ley brasileña que permite a las empresas tener más margen para evitar su quiebra.

Todas las acciones de ejecución son suspendidas por la Justicia durante 180 días, plazo en el que la compañía tiene que presentar un plan de pago a los acreedores, que lo necesitan aprobar.

En abril de 2019, la aerolínea se vio obligada a devolver los aviones que utilizaba a sus arrendadores.

La compañía aérea llegó a disponer de 48 aeronaves, aunque en la actualidad no tiene ninguna.

En mayo de 2019, la Agencia Nacional de Aviación Civil suspendió todos los vuelos de Avianca Brasil, al alegar temer por la falta de capacidad de la empresa de operar con seguridad.

Tras ello, la Justicia propuso declarar la bancarrota de la compañía al considerarla económicamente inviable.

No obstante, la Segunda Cámara del Derecho Empresarial rechazó la medida y mantuvo el proceso de recuperación judicial, al entender que no se podía impedir que la empresa intentara cumplir con sus compromisos.

Avianca Brasil nació en 1998 con el nombre de Oceanair Líneas Aéreas, aunque un año más tarde llegó a un acuerdo con Avianca Holdings que le permitía hacer uso de la marca Avianca Brasil. Esta autorización finalizó en agosto de 2019.

La aerolínea llegó a ser la cuarta mayor en el mercado brasileño, tras Latam, Gol y Azul.