Yokohama. Nissan Motor Co acordó comprar una participación de un 34% en Mitsubishi Motors Corp, con lo que asumirá en la práctica el control de su rival más pequeño con una apuesta de rescate de US$2.200 millones.

El acuerdo es un salvavidas para Mitsubishi Motors, que está sumido en su tercer escándalo en dos décadas, pero también debería representar un impulso para Nissan.

La segunda automotriz más grande de Japón ha tenido problemas para hacer incursiones en países de Asia como Tailandia y Filipinas, donde los modelos de Mitsubishi son populares.

Mitsubishi y Nissan ya cooperan en el desarrollo y la fabricación de vehículos con una asociación que comenzó en el 2011, pero ese acuerdo no implicaba una participación accionaria cruzada.

En virtud del acuerdo del jueves, que ambas compañías dijeron ayudará Mitsubishi a "recuperar la confianza", Mitsubishi Motors emitirá nuevas acciones a Nissan con un descuento de un 5,3% respecto al cierre del miércoles, reuniendo 237.400 millones de yenes (US$2.180 millones).

Eso entregará a Nissan poco más de un tercio del grupo, lo suficiente como para que pueda ejercer funciones de control bajo las reglas de los accionistas en Japón.

El presidente ejecutivo de Nissan, Carlos Ghosn, dijo que ambas firmas ahora compartirán y desarrollarán conjuntamente su tecnología, y lograrán "miles de millones" en sinergias mediante la coordinación de compras, utilización de plantas y cooperación en los mercados en crecimiento.

"Creemos que esta será una situación con la que sólo podemos beneficiarnos (...) Creemos que podemos ayudarnos, apoyarnos y crecer juntos mejor de lo que Mitsubishi lo habría hecho por sí solo", dijo Ghosn a la prensa en una conferencia de prensa conjunta en Yokohama, al sur de Tokio.

Ghosn dijo que Nissan podrá nominar a un tercio del directorio de Mitsubishi Motors, agregando que cree que la automotriz también estará dirigida por un ejecutivo de Nissan.