Fráncfort. BASF acordó comprar los negocios de semillas y herbicidas de Bayer por 5.900 millones de euros (US$7.000 millones) en efectivo, en momentos en que Bayer trata de convencer a las autoridades de competencia que aprueben su adquisición planeada de Monsanto.
Sin embargo, el acuerdo sólo se llevará a cabo cuando Bayer adquiera finalmente el grupo estadounidense de semillas y químicos agrícolas Monsanto, una operación que espera poder cerrar a principios de 2018.
BASF, el tercer mayor fabricante mundial de productos químicos para cultivos, había evitado hasta el momento los activos de semillas y en su lugar se había concentrado en la investigación de características de la plantas como la tolerancia a las sequías, que vende o licencia a los desarrolladores de semillas.
Pero el acuerdo de Bayer para comprar al grupo de semillas estadounidense Monsanto por US$66.000 millones, anunciado en septiembre del 2016, creó oportunidades para que sus rivales obtengan activos que necesitan ser vendidos para satisfacer a las autoridades de competencia.
Bayer había ofrecido vender activos por valor de unos US$2.500 millones. La Comisión Europea dijo en agosto que las desinversiones ofrecidas por Bayer hasta ahora no iban lo suficientemente lejos e inició una investigación en profundidad del acuerdo.
“La decisión de BASF de adquirir activos de semillas representa un cierto cambio en su visión previa sobre sus necesidades para responder a la reciente consolidación de la industria en la agricultura”, dijeron analistas de Morgan Stanley.
“No obstante, los activos propuestos para la adquisición son de alto margen y de alto crecimiento y representan una adquisición razonable”, agregaron.
* Con información de DW.