Zurich. El Parlamento suizo apoyó un acuerdo fiscal suizo-estadounidense crucial para el futuro de UBS AG, con lo que puso fin a meses de incertidumbre sobre el pacto y allanó el camino para una recuperación del banco más grande de Suiza.

Las dos cámaras del Parlamento acordaron descartar un referendo sobre el tema, por lo que las autoridades fiscales suizas serán capaces de entregar en tiempo y forma a sus pares estadounidenses las cuentas de 4.450 clientes de UBS, a quienes el banco ayudó a eludir impuestos.

Berna y Washington sellaron el acuerdo en agosto de 2009 para poner fin a una demanda contra UBS, pero los clientes ricos continuaron abandonando en manada a la entidad debido a la posibilidad de nuevas acciones legales si Suiza incumplía su promesa de suministrar la información en un año.

Banco gana terreno. "UBS finalmente se libró de la situación y volverá a ganar terreno en la administración de riqueza", dijo el analista de Sarasin Rainer Skierka.

La no entrega de las cuentas de los clientes a tiempo incumpliría con los terminos del tratado fiscal y podría provocar una represalia del Gobierno de Estados Unidos.

"UBS finalmente se libró de la situación y volverá a ganar terreno en la administración de riqueza", sostuvo un analista.

"La aprobación del Parlamento significa que ahora el camino está libre para que se den a conocer los detalles de los clientes de UBS", dijo el Ministerio de Justicia Suizo.

UBS vio con beneplácito la decisión del Parlamento.

"UBS continua centrando su atención en cumplir en tiempo y forma con su obligación y confía que lo logrará en el plazo estipulado", dijo el banco en un comunicado.

La entidad ha entregado los datos a las autoridades fiscales suizas para su procesamiento, tal como fue requerido por Estados Unidos, pero una laguna jurídica impidió que Suiza pasara los datos.

Una corte suiza bloqueó en enero la transferencia de datos, lo que obligó al Gobierno a sortear esa decisión legal con una aprobación del acuerdo por parte de las dos cámaras del Parlamento.