Los precios internacionales del café caerían fuertemente en 2023 por un aumento de la cosecha de Brasil que provocaría un superávit en la oferta por lo que Colombia deberá decidir si vende su producción ignorando la cotización de referencia de la Bolsa de Nueva York, dijo el miércoles un líder cafetero.

Colombia, el primer abastecedor mundial de café arábigo lavado, apunta a cerrar el 2022 con una producción levemente por debajo de los 12 millones de sacos de 60 kilos, la más baja en los últimos ocho años, como consecuencia de las fuertes lluvias ocasionadas por el fenómeno climático de La Niña.

La cosecha de café del país cerró el 2021 en 12,6 millones de sacos de 60 kilos y las exportaciones alcanzaron 12,4 millones de sacos.

"Tal vez estamos cerrando un ciclo, el ciclo de precios altos", dijo el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, Roberto Vélez, en una conferencia de prensa.

El dirigente aseguró que en los últimos años los precios del café han estado en niveles remunerativos para los productores, lo que calificó como el periodo con mejores cotizaciones desde que se rompió el Pacto Internacional del Café, en 1989.

"Lo que es claro es que se recupera la caficultura de Brasil, se recupera nuevamente las plantaciones de café y con ello el mercado internacional respira de una manera distinta. Venimos de un déficit de casi siete millones de sacos en materia de balanza, de oferta y demanda mundial, a un superávit que muy seguramente producirá la próxima cosecha de Brasil", afirmó.

Vélez aseguró que los estimativos para la próxima cosecha de Brasil oscilan entre 55 y 65 millones de sacos, impulsada por una renovación de 400.000 hectáreas que entrarán en producción en los próximos dos años.

"Mayores cosechas de Brasil están asociadas con precios más bajos", aseguró el dirigente cafetero.

MOMENTO DE DECISIÓN

"Puede llegar el momento en donde la bolsa baja, pero no necesariamente por una abundancia de cafés suaves, sino por una abundancia de café de Brasil, y ese será el momento en donde nosotros vamos a tener que enfrentar una decisión, si tomamos un precio fijo y no vendemos café por debajo de ese precio independiente de los niveles de la bolsa", afirmó Vélez.

Los precios del café en la Bolsa de Nueva York, que superaron los 2,50 dólares por libra en la Bolsa de Nueva York este año, cayeron recientemente a niveles de 1,51 dólares por libra.

Los cafeteros colombianos reciben sobre ese precio una prima de calidad de entre 60 y 70 centavos de dólar, lo que aumenta sus utilidades.

Vélez propuso en febrero de 2019 la posibilidad de vender la cosecha de café de Colombia a un precio que cubriera los costos de producción más un margen de ganancia, sin tener en cuenta la cotización de referencia de la Bolsa de Nueva York.

En julio ese mismo año, Vélez solicitó un precio base internacional de 2 dólares por libra para que los productores puedan tener un ingreso digno que les evite pérdidas y abandonar la industria.

Colombia, el tercer productor mundial de café después de Brasil y Vietnam, podría empezar a recuperar sus niveles normales de producción a comienzos del próximo año cuando se reduzcan las lluvias, afirmó Vélez.

El país sudamericano, conocido por sus cafés suaves y de alta calidad, tiene cultivadas 840.000 hectáreas con cafetales, unas 500.000 familias dependen de esa actividad y tiene capacidad para producir anualmente alrededor de 14 millones de sacos.

Además de las lluvias, Colombia experimentó en 2022 una caída de su productividad de 22 a 17 sacos por hectárea y una reducción de los niveles de renovación de los cultivos debido a los buenos precios, concluyó Vélez.