El pasado miércoles 22 de mayo los presidentes Juan Manuel Santos de Colombia y Laura Chinchilla de Costa Rica firmaron el Tratado de Libre Comercio (TLC) que da por iniciada una nueva integración comercial. Luego de cuatro rondas de negociación y dos reuniones ministeriales, sólo queda pendiente la aprobación legislativa por parte de los respectivos Congresos.
El TLC con Costa Rica obedece a las políticas comerciales del país que tienen como objetivo lograr que Colombia tenga acceso preferencial en los diferentes mercados, no sólo en productos, sino también en servicios e inversión y acercarse aun más con los países de Centroamérica para lograr consolidar las relaciones y complementar el acuerdo con el denominado Triangulo Norte, conformado por El Salvador, Guatemala y Honduras, el cual fue firmado en e2007 y entró en vigor en 2010. Por parte de Costa Rica, este acuerdo comercial genera un puente muy importante para unirse a la Alianza del Pacifico, donde por el momento oficia como país observador.
El TLC con Costa Rica, es un buen ejemplo de acuerdos de negociación internacional con países de menor tamaño que Colombia, pero con un nivel de importaciones (US$18.000 millones) que puede dar oportunidad para muchas de nuestras empresas de explorar nuevas oportunidades en mercados con cultura similar y tamaños mas manejables.
La economía de Costa Rica es considerada como una de las más estables de Latinoamérica, basándose en las exportaciones agrícolas tradicionales de banano, café, azúcar entre otros, y además de algunos productos industriales, agroindustriales y especializados. Su orientación importadora se basa en bienes industriales, los cuales se verán altamente beneficiados con el TLC, ya que se desgravaran el 98% del universo arancelario y el 75% va a ser de liberación inmediata.
Costa Rica importa aproximadamente US$$18.263 millones y Colombia participa con alrededor de US$327 millones, cerca de 1,79% del total de las importaciones de ese país. Otro factor muy importante y altamente explotado en Costa Rica es el turismo ecológico, el cual aporta alto flujo de divisas y al mismo tiempo permite atraer inversión extranjera directa, gracias a la estabilidad política y los incentivos que ese país ofrece.
En 2012, el PIB colombiano superó ocho veces el PIB de Costa Rica (medido en dólares corrientes) y la balanza comercial entre los dos países favorece a Colombia, con un superávit de US$206 millones. Las exportaciones nuestras a Costa Rica son muy pequeñas y corresponden al 0,46% del total de las exportaciones, ubicándose ese país centroamericano en el puesto 34 del ránking, según principales destinos de exportación de nuestro país.
Uno de los sectores que más exporta es el industrial, con productos como polímeros de propileno, insecticidas, además de derivados del petróleo. Las importaciones nuestras desde Costa Rica alcanzan los US$72 millones, y los principales productos son los aparatos de óptica, fotografía y cinematografía; plomo y sus manufacturas, materias plásticas y sus manufacturas, y caucho y sus manufacturas, entre otros.
El TLC con Costa Rica es un buen ejemplo de acuerdos de negociación internacional con países de menor tamaño que Colombia, pero con un nivel de importaciones (US$18.000 millones) que puede dar oportunidad para muchas de nuestras empresas de explorar nuevas oportunidades en mercados con cultura similar y tamaños mas manejables.
Las exportaciones del Valle del Cauca en el 2012 fueron de papel kraft crudo, harina de maíz y acido cítrico entre otros. Con el TLC las empresas vallecaucanas de confitería y chocolatería tendrán una alta participación, ya que en la negociación la agroindustria fue una de las más beneficiadas.