Hace algunos años las empresas descansaban en los líderes para el cumplimiento de sus objetivos, y muchas veces el líder "a pesar" de su equipo "lograba" cumplirlos. Hoy la forma de liderar y administrar las empresas ha cambiado en forma importante por la alta competencia en todas las industrias, las continuas crisis, la globalización, el acceso a la información, el desarrollo del conocimiento y de las personas.

En este contexto, para que el nuevo líder sea exitoso debe poseer un equipo de alto desempeño y trabajar codo a codo durante el agobiante día, porque hoy existe una directa correlación entre el éxito de la empresa y el talento de su equipo.

Por lo anterior, el nuevo líder debe tener competencias y habilidades específicas para lograr que su equipo le permita obtener los resultados propuestos. Este líder se define como un líder orientado a los resultados.

No siempre se alcanza la meta rápidamente, pero no hay que frustrarse, trabajar constantemente en el logro de objetivos entregando todo de sí, para que los resultados sean óptimos. Hay que aplicar el dicho, no se ha cometido un error, sino que se ha ganado experiencia.

Entre las características que se deben poseer para logar este tipo de liderazgo y poder cumplir las metas fijadas, el líder debe ser creíble y auténtico. Además, es importante que direccione al equipo para que se preocupen de contribuir con el negocio y agregar valor. Si esto ocurre todos se sentirán más satisfechos con lo que hacen y habrá motivación para mejorar las tareas.

Otro punto fundamental es capacitar a sus colaboradores. Decir que las personas son lo más importante es fácil, pero preocuparse de desarrollarlos, que alcancen su máximo potencial y enseñarle nuevas cosas es hacerse cargo de ellos.

También el líder debe ser un ejemplo, optimista y alegre. Es importante que tenga un buen desempeño y sea un ejemplo para sus colaboradores. Asimismo, debe ser un hincha de su equipo y empresa, cuando el trabajo se hace con optimismo y alegría tiene un sabor distinto y un resultado mejor aún.

Además, saber escuchar al equipo es fundamental para estar alineado y poder obtener buenos resultados; esto permite corregir errores y ver soluciones a los problemas.

No siempre se alcanza la meta rápidamente, pero no hay que frustrarse, trabajar constantemente en el logro de objetivos entregando todo de sí, para que los resultados sean óptimos. Hay que aplicar el dicho, no se ha cometido un error, sino que se ha ganado experiencia.