Ya se fue 2020. “¡Al fin!”, dirán algunos. Sin embargo, hay elementos que nos invitan a pensar en 2021 con más mesura que optimismo. De entrada, de acuerdo a un estudio publicado en El Mercurio, un 73% de las familias de mayor patrimonio en el país quiere disminuir su inversión en Chile. Por otra parte, tenemos un calendario electoral muy apretado y clave para nuestro desarrollo en las próximas décadas. Aun así, ya pasamos 2020 con una pandemia desatada, por lo que solo nos queda ser resilientes y mirar este año de manera positiva, pero realistas y consecuentes con nuestros discursos, especialmente en comunicaciones corporativas y márketing.

En este sentido, desde el estallido social hasta la pandemia vimos muchos cambios en la forma de comunicar de las personas entre sí y, por supuesto, de las marcas. Sin lugar a dudas, los cambios obligatorios de hábitos nos han llevado a consumir de diferentes maneras los medios de comunicación. Por ejemplo, a lo largo de la crisis social de Chile, la radio fue el medio con mayor reputación, sin embargo, durante la pandemia la televisión fue recuperando terreno.

Sin mencionar el cambio radical en el mundo laboral con la entrada obligatoria del teletrabajo, en la arena digital, se popularizó la red social Tik-Tok, las campañas de influenciadores aumentaron exponencialmente, siendo hoy un canal de conversión muy importante para marcas de consumo masivo. Esto va de la mano con el crecimiento constante de la inversión en medios digitales en los últimos años.

En contraparte, la inversión en medios, desde 2019 a la fecha, se redujo en aproximadamente un 20%, según datos de la industria. Claramente la desaceleración económica del país contribuyó a esta reducción. No obstante, para 2021 deberíamos ver un repunte en la inversión dadas las condiciones de un ambiente político-social más estable y un mayor conocimiento de cómo tratar la pandemia.

Por otra parte, el precio del cobre ha ido rompiendo récords y recuperando el terreno perdido en los últimos años. En diciembre cerró con una cifra superior a los US $3,5, llegando a números que no se veían desde marzo de 2013. Otro motivo para ver con optimismo este año y una gran noticia para todos los sectores productivos, siendo un respiro para las arcas fiscales que se han visto sobreexigidas por las contingencias del acontecido 2020. A esto se suma el exitoso proceso de vacunación, destacado en la prensa internacional tanto por su efectividad como su rapidez. Así, podríamos presagiar un mejor panorama para la industria de los medios en el país.

Este 2021 puede ser uno de los años más importantes en la historia reciente de Chile, lo que nos lleva a mirar con buenos ojos lo que se viene. Sin embargo, desde comunicaciones y márketing tenemos que ser cautelosos e inteligentes para poder llevar nuestros mensajes clave a las diferentes audiencias sin caer en las falsas gratificaciones en pos de tener resultados inmediatos. En el largo plazo, la honestidad en el discurso corporativo será fundamental de aquí en adelante.