El sector de retail es actualmente como un bote en medio de una tormenta. Todo lo que ocurre a su alrededor afecta su recorrido, comportamiento y capacidad para mantenerse a flote. Y en este momento, el efecto Marie Kondo (la famosa autora, empresaria y consultora de "organización" japonesa) es uno que está golpeando el bote.
Netflix cuenta con 118 millones de socios y muchos de ellos han visto o escuchado de la serie de Marie Kondo para ordenar, una serie con una mujer con un don especial para organizar. Basada en su libro "El cambio mágico de la limpieza: el arte japonés de ordenar y organizar", la serie muestra cómo Kondo explica su ya famoso método para ordenar y despejar la casa, una oficina y hasta sus vidas privadas.
Uno de los principios del método Marie Kondo es solo "guardar las cosas que hablan al corazón, y descartar las cosas que ya no traen alegría". Su libro es best seller del The New York Times y desde el estreno de la serie en Netflix más gente que nunca ve los beneficios de organizar sus espacios. Al realizar esta limpieza, muchos encuentran que gran cantidad de objetos que ya no les causan ninguna alegría. Esto significa que muchos objetos se descartan. Pero, ¿a dónde va todo eso?
La basura de uno puede ser el tesoro de otro
A medida que Marie Kondo y sus fieles seguidores continúan con su organización, el fenómeno minimalista debe ser una sirena para las empresas de retail, recordándoles que deben ordenar su propio negocio si desean sobrevivir.
Entonces, ¿qué significa todo este descarte de productos para el sector de retail? Por un lado, habrá más productos en consignación, donaciones y, por supuesto, a la basura. La moda rápida ya se critica por introducir ropa descartable en el mercado y en el medio ambiente, ya que el sector en general crea 4% de la basura anual.
Asimismo, según noticias recientes la empresa Burberry quemó US$40 millones de mercadería para preservar la originalidad del producto y la exclusividad de la marca. Marcas globales como Nike y H&M han sido también acusadas de prácticas similares atroces para el medio ambiente. Pero, aunque las empresas tengan mayor consideración con la sustentabilidad, el Efecto Marie Kondo significa que más personas estarán descartando ropa de sus roperos generando más basura que antes. Además, aunque muchas de esas prendas sean donadas, sólo el 0,1% del material reciclable recolectado por entidades de beneficencia se recicla en nueva fibra textil.
Algo debe cambiar. Quizás las empresas de retail deberían reconsiderar comprar ítems con poco uso en consignación dentro de sus propias tiendas. Otra idea es aceptar ítems no deseados a cambio por un descuento, para garantizar que se recicle adecuadamente (o que vuelvan a la cadena de suministro como materia prima). De esta manera, todos ganan.
Inventario no deseado que regresa a la cadena de suministro
Muchas empresas se ocupan y se dedican a proveer la mejor experiencia de compras de todos los tiempos, sin embargo, se olvidan de la logística inversa. Marie Kondo y su dedicación al descarte puede cambiar eso.
¿Qué pasa cuando el producto que llega por correo de una empresa de comercio electrónico, de un conocido retail o quizás un regalo no nos despierta la alegría sugerida por Kondo? Devolución, devolución y más devoluciones. En definitiva, eso significa que si la cadena de suministro de la empresa no está preparada para reusar, reubicar y re disponer del material que no causa alegría, puede ser muy costoso. Conforme a un estudio de OnePoll, las devoluciones han aumentado 40% en el último año y se calcula que US$90 mil millones de compras navideñas se devuelven para finales de febrero.
Además, una cadena de suministro colaborativa es la única manera de garantizar que las devoluciones no sean tan costosas. Pero las empresas de retail no tienen problemas en atraer y sorprender a sus clientes.
Crear empresas que traigan alegría
Imaginemos que todas las carteras de una tienda se consideren que no "brindan alegría" y terminan en tiendas de segunda. Ahora imaginemos que esas carteras son de una marca de lujo. Cuando los ítems no deseados se envían a las tiendas de segunda y a sitios de comercio electrónico en masa, ¿tiene el ejército de organizadores de Marie Kondo el poder de bajar el valor de hasta las mejores marcas, solo porque la mercadería no brinda alegría algunos meses o años después de su compra?
La única forma de garantizar que la fortaleza de la marca continua (y no termina en una tienda de descuento) es lograr que esa experiencia de alegría sea parte de la compra, ya sea en la tienda física u online. En el momento justo en que los pantalones de yoga están a punto de partir en el medio de una furia Marie Kondo, la persona puede recordar la clase gratis que le ofrecieron cuando los compró, los amigos que hizo en la clase y la inspiración diaria que recibe de la cuenta de Instagram de la marca, ¡y listo! Brindó alegría y los pantalones se quedan con su dueño, que ahora ha asociado alegría con el producto y con la marca.
A medida que Marie Kondo y sus fieles seguidores continúan con su organización, el fenómeno minimalista debe ser una sirena para las empresas de retail, recordándoles que deben ordenar su propio negocio si desean sobrevivir. Crear una cadena de suministro eficiente y sustentable es clave para brindar a los clientes una experiencia que traiga alegría un largo tiempo después de su compra.