Como latinoamericano hay muchas cosas para tener en cuenta a la hora de emprender un viaje al centro de Europa, más precisamente a Alemania. Si bien las diferencias culturales son extremas, hay puntos a favor que nos definen como personas de otro continente y que son a su vez muy valoradas si se quiere encontrar un trabajo calificado en la fría Alemania.
Sin embargo, nombraré en este primer artículo las desventajas o “piedras“ que existen en este país y que nos sirven de advertencias desde la perfectiva de un latinoamericano. No me centraré únicamente en el plano humano, ya que quiero encontrar un paralelo para que sepan cómo insertarse en el mercado laboral alemán.
Para ser aceptado seriamente en este mercado laboral, uno tiene que adaptarse a estas situaciones, caso contrario, se corre el riesgo de ser tomado como “no apto” para cargos gerenciales.
Como gran obvia desventaja está el idioma, que a diferencia de lo que han vivido en grandes cantidades los ecuatorianos en España, en este caso ni siquiera se trata de un idioma de raíz latina. Algo lamentable, ya que la mayoría de los trabajos "bien pagos", que oscilan entre los 60.000 y 90.000€ euros anuales bruto, requieren de un buen conocimiento del idioma.
Pero ante esa dificultad, tenemos una salida, un tip clave: el gobierno alemán destina en forma gratuita a habitantes no Unión Europea cursos básicos de alemán para extranjeros en institutos dependientes del gobierno. Lo único que se nos solicita de regreso, es que debemos tener un mínimo de concurrencia para poder gozar de este beneficio.
En promedio y de acuerdo a mi experiencia podría decir que para una persona de habla hispana con una educación universitaria y sabiendo un idioma extranjero (ingles), el tiempo promedio para dominar al alemán oscila entre dos y cuatro años si concurre con disciplina a todos los cursos y se mantiene viviendo en el país.
Ello no es del todo desalentador, ya que muchas personas entre 25 y 30 años vienen a Alemania para realizar algún estudio pos universitario y en paralelo estudiar alemán; durante ese periodo pueden encontrar trabajos part time en el cual el idioma de trabajo sea el inglés (ejemplos de estos trabajos pueden encontrarse en compañías como Adidas, Bosch, Siemens, Google, entre otras).
Para no extenderme más en este tema, paso a la otra problemática que nos encontramos a la hora de comenzar nuestras vidas en este país, y es por supuesto la gran diferencia cultural, no sólo en lo personal, sino en el ámbito laboral. Pese a las diferencias interculturales entre los países latinoamericanos, que no son pocas, confrontados a la realidad cultural alemana, las anteriores las encontraremos insignificantes a la hora de compararlas.
Cuando se habla de la famosa eficiencia alemana, no es ningún mito, sino algo muy cierto a la hora de venir a la oficina. No hay prácticamente ningún trato a nivel personal y no se pierde tiempo alguna en charlas banales y saludos de buenos días, sino que llegas, te ubicas en tu escritorio y comienzas a trabajar sin ninguna distracción a nivel personal. Los horarios laborales en oficinas son típicamente entre 8 AM y 5 PM, con una hora para el almuerzo, aunque no está bien visto tomarse la hora completa para ello, porque lo óptimo es aprovechar al máximo las cinco horas laborales.
En la cultura alemana en el ámbito laboral es muy importante no ser temperamental, sin importar la situación de estrés en que te encuentres, sobre todo a la hora de contar con personal a cargo.
El alemán reacciona fríamente ante una situación de extrema. Busca, analiza las posibilidades y propone una solución sin ningún ademán que demuestre un halo temperamental. Para ser aceptado seriamente en este mercado laboral, uno tiene que adaptarse a estas situaciones, caso contrario, se corre el riesgo de ser tomado como “no apto” para cargos gerenciales.
Espero que esta nota introductoria sea de ayuda a los tantos latinoamericanos que buscar ampliar sus fronteras en tierras alemanas.